El lunes los 300 alumnos del turno mañana de la escuela experimental de Bellas Artes protestaron en la calle para pedir que acondicionen el edificio de Laprida al 200 y que se rinda cuentas de los $500 que abonaron de matrícula.
Los chicos se quejaron por el estado de las instalaciones (baños sin agua ni grifos), la falta de limpieza de todo el establecimiento, la deficiente ventilación de los talleres de pintura y la suspensión de las clases de Educación Física. Las autoridades de la UNT se hicieron eco de estos reclamos y ayer se reunieron con representantes de la escuela durante tres horas. "Mañana (por hoy) comenzarán a arreglar los baños", confirmó Marta Juárez de Tuzza, subsecretaria académica. A cambio, los representantes del Centro de Estudiantes se comprometieron a formar una comisión que controle el adecuado uso de las instalaciones. "Ya arreglamos varias veces la escuela, pero lo haremos una vez más", dijo la funcionaria.
También acelerarán los trámites para tener una sede propia y aclaró que la administración de los fondos está debidamente auditada.